Estos días, hemos visto cómo todas las competiciones deportivas se han detenido o suspendido, se ha aplazado el inicio de la temporada en diferentes disciplinas y aún sigue en el aire la disputa de los Juegos Olímpicos de este verano en Japón. Para un deportista de elite, este ‘parón’ supone un ‘alto’ en el camino de cara a conseguir su objetivo tanto a nivel físico como técnico y mental y es quizás este último campo el que resulta más difícil de trabajar.
Cuando un deportista se encuentra inmerso en una competición o tiene un plazo de tiempo concreto para alcanzar una meta tiene unas rutinas de entrenamiento y vive concentrado y focalizado en un partido, una carrera, una marca, por lo que se encuentra inmerso en un estrés que desaparece al disiparse el objetivo. En esta ocasión, dicho objetivo se ha visto alterado de forma inesperada, pero no ha desaparecido ni tiene una fecha concreta de retorno. En este entorno, puede mantenerse la forma física con un buen plan de trabajo a distancia, tratar de seguir mejorando la técnica con la práctica de movimientos, pero si no se posee una fortaleza psicológica adecuada, costará mucho mantener la tensión de la competición. Para conseguirlo, puedes seguir algunos de los consejos de nuestros profesionales:
- Hacer valer la resiliencia que posees y ser flexible. Las personas tenemos una capacidad innata para hacer frente y adaptarnos a las situaciones difíciles y altamente estresantes y, hoy, los deportistas tienen que saber utilizarla.
- Tener autocontrol y resistirse a la frustración. La actual situación no es culpa de nadie y afecta a todos por igual, así que hay que tener una actitud positiva y transformar la adversidad en una fortaleza. Es un tiempo de inflexión, podrás descansar, recuperarte físicamente y prepararte mejor para volver a tope cuando se reanude la competición o dispondrás de más semanas para acabar de perfeccionar aquellos puntos que aún no acababan de salir bien.
- Evitar las dudas, el miedo y los pensamientos negativos, ya que paralizan y distraen la atención del objetivo real. Las circunstancias han cambiado y hay que asumirlas con naturalidad para darle la vuelta a la situación, aprender cosas nuevas y salir de la zona de confort con la finalidad de mejorar y volver a rendir al máximo porque la meta va a seguir siendo la misma.
- Visualizar lo que quieres conseguir. Para mantener la concentración, es aconsejable elaborar una imagen mental de lo que se desea lograr porque, de esta manera, la mente se enfoca en el objetivo. Éste debe depender de ti y ser factible. Dedica, cada día, unos minutos a imaginar lo que quieres que suceda porque el cerebro retiene dicha imagen en estado activo y es más fácil de transformarla en realidad cuando llega el momento.
Estas son algunas de las pautas que puedes seguir para entrenar tu mente durante los días que dure esta complicada situación, pero si necesitas asesoramiento personalizado o quieres consultar algún aspecto concreto de tu preparación psicológica, contacta con nuestros profesionales, que se mantienen activos vía on line. Puedes enviarnos un correo a info@logikclinic.com